Rebelde y Salvaje
Siempre fui tremendita, desde chiquita.
Mis padres no hallaban que hacer para tranquilizarme. Todo el día jugando, brincando. Mi madre me bañaba hasta 2 veces al día porque no le gustaba que me sentara a la mesa a comer toda sudada, mojada, con el cabello pegado a la frente como una loquita.
No cambié mucho con el tiempo. y cuando descubrí el placer que me producía el sexo, me convertí en una devoradora. He estado con todo el mundo, amigas, amigos , tríos, pareja de esposos, juguetes, aparatos, utensilios, frutas, verduras, etc. etc.
No puedo evitar sentir deseo, y la adrenalina que me produce cada posibilidad de sentir placer me atrae, me seduce. Soy viciosa y adicta al placer sexual.
Es por eso que ando en una moto grandota, poderosa. Sentir como vibra entre mis piernas me pone a sudar y me calienta. Siempre salgo en ella buscando aventuras, persiguiendo el deseo y el placer donde quiera que se encuentren.
Amo tanto el sexo como amo a mi moto.
¿Quieres que te pase buscando?
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