Ábremelo
Ella no estaba muy segura, yo ya se lo había pedido, pero me decía que la daba miedo, que le iba a doler. Yo le dije que había maneras, que iríamos poco a poco y que yo haría que lubricara por todas partes, ...y finalmente así fue.
Comenzamos como siempre, besos, caricias, y sexo oral para calentarnos. Ella le encanta chupármelo, dice que se le hace agua, que sentirlo grueso y caliente hace que se moje toda, arriba y abajo.
Le dije que siguiera, que su humedad la mojaría toda y que cuando sintiera que su culito también estaba mojado, me avisara.
Tan pronto sintió un chorro de miel bajarle hasta el ano, me dijo, ¡ya! ¡Métemelo!
La puse en cuatro y se lo metí primero por la vulva, estaba chorriadisima y aproveché para lubricarle el ano, corriendo su jugo con mi pene.
Ella sintió me glande en el culo y me dijo, "Ábremelo, duro, ya no aguanto, mételo" Y así lo hice. Primero dejó que le entrara todo, luego, apretó y pidió que lo empujara, adentro, profundo. ¡Dale papi, dale!" Cambiamos de posición para que entrara más. Así, que rico papi, que divino, dale, decía. ¿Duro! ... Hasta que le dije que me iba a correr. Dámela en la boca, quiero saborearla, y me corrí todo en sus labios para que ella se tomara mi leche, que tanto le gusta.
De ahora en adelante me lo metes por ahí papi, me encantó, me volvió loca. Me dijo. fue lo máximo.
Fotos: TeenMegaWorld
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